Bóvedas su construcción y empleo en la arquitectura Henri J. W. Thunnissen ; prólogo de Santiago Huerta ; traducción y ensayo introductorio de Rafael García García ; con una nota biográfica de Claudia Thunnissen.
Tipo de material: TextoIdioma: Español Series Teoría e historia de las construccionesDetalles de publicación: Madrid Instituto Juan de Herrera. Escuela Técnica Superior de Arquitectura, 2012.Edición: 1a edDescripción: xlvi, 372 p. il. ; 24 cmISBN:- 9788497284257
- 721.43 T485b 21
Tipo de ítem | Biblioteca actual | Colección | Signatura topográfica | Copia número | Estado | Fecha de vencimiento | Código de barras | |
---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Libro Colección General | Central Bogotá Sala General | Colección General | 721.43 T485b (Navegar estantería(Abre debajo)) | 1 | Disponible | 0000000132256 | ||
Libro Colección General | Central Bogotá Sala General | Colección General | 721.43 T485b (Navegar estantería(Abre debajo)) | 2 | Disponible | 0000000132257 |
Incluye referencias bibliográficas (p. 351-360) e índices.
1. Geometría ; 2. Construcción ; 3. Estética ; 4. Historia de la construcción abovedada ; 5. Estabilidad de las bóvedas
El libro comienza con el estudio de la geometría, de las posibles formas y los problemas constructivos que suponen.
El brevísimo capítulo sobre estética sirve sólo para reafirmar su convicción sobre la bondad y la necesidad de las bóvedas también desde el punto vista estético. En la parte histórica explica con claridad la evolución del arte de abovedar en las distintas épocas. El afán no es arqueológico: trata de plantear los problemas inherentes al abovedamiento y su contrarresto, y de explicar las distintas soluciones. Finalmente, estudia las 'bóvedas actuales', las que él y algunos arquitectos todavía construían en los años 1930 y 1940. El libro termina con un estudio de la estabilidad de las bóvedas y una selecta bibliografía de fuentes consultadas. Todo el libro transmite entusiasmo por las posibilidades de la construcción abovedada, ignorada por el movimiento moderno. No hay motivo para renunciar a uno de los más bellos elementos arquitectónicos.