Elogio de la educación lenta Joan Domènech Francesch
Tipo de material: TextoIdioma: Español Series Micro-macro referencias.Fundamentos de la educación ; 21Detalles de publicación: Barcelona Graó 2009 Reimpresión 2010Edición: 1a edDescripción: 165 p. 21 cmISBN:- 9788478277193
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Libro Colección General | Educación Bogotá Sala General | Colección General | 370.1 D653e (Navegar estantería(Abre debajo)) | 1 | Disponible | 0000000103801 |
Incluye referencias bibliográficas
La naturaleza de la educación ; El tiempo en los tiempos de la modernidad líquida ; Los movimientos de la lentitud ; La educación y la escuela: espacio y tiempo ; Elogio de la educación lenta ; 15 principios para la educación lenta: 1. La educación es una actividad lenta ; 2. Las actividades educativas han de definir su tiempo y no al revés ; 3. En educación, menos es más ; 4. La educación es un proceso cualitativo ; 5. El tiempo educativo es global e interrelacionado ; 6. La construcción de un proceso educativo deber ser sostenible ; 7. Cada niño y cada persona necesita su tiempo para el aprendizaje ; 8. Cada aprendizaje debe realizarse en su momento ; 9. Para conseguir aprovechar mejor el tiempo hay que priorizar y definir las finalidades de la educación ; 10. La educación necesita tiempo sin tiempo ; 11. Hay que devolver el tiempo a la infancia ; 12. Tenemos que repensar el tiempo de las relaciones entre adultos y niños ; 13. El tiempo de los educadores debe redefinirse ; 14. La escuela debe educar el tiempo ; 15. La educación lenta forma parte de la renovación pedagógica ; Decálogo para una educación lenta ; 50 propuestas para desacelerar el tiempo ; Epílogo
Los movimientos de la lentitud plantean alternativas a la aceleración que condiciona nuestras vidas: comida, desplazamientos, relaciones personales… Todo está impregnado por una velocidad que no deja saborear el sentido de las cosas y nos aboca a una sociedad neurótica y despersonalizada. Más, antes y más rápido no son sinónimos de mejor. Aplicar esta afirmación en la escuela y en la educación es una de las cuestiones a las cuales el autor intenta dar respuesta en este libro en que se replantea el tiempo, no desde el punto de vista organizativo, sino con la intención de encontrar nuevas dimensiones que den sentido, entre otros, a la diversidad de ritmos de aprendizaje. La educación lenta es un paradigma que no pretende hacer las cosas a poco a poco, sino saber encontrar el tiempo justo para cada uno y aplicarlo en cada actividad pedagógica. Educar para la lentitud significa ajustar la velocidad al momento y a la persona. Hacer elogio de la educación lenta tiene sentido hoy y aquí en tanto que representa el elogio de un modelo educativo entendido como la pieza clave en el proceso de humanización de la sociedad. El tiempo no puede colonizar nuestras vidas y las de la escuela, sino que hay que devolverlo a los niños y niñas y al profesorado para que pueda ser un tiempo vivido plenamente y, por tanto, plenamente educativo