Imagen de portada de Amazon
Imagen de Amazon.com

El Dios de los ancianos José-Román Flecha Andrés

Por: Tipo de material: ArtículoArtículoIdioma: Español Series Goel ; 3Detalles de publicación: Salamanca [España] Secretariado Trinitario 2009Edición: 1a edDescripción: 299 p 20 cmISBN:
  • 9788496488328
Tema(s): Clasificación CDD:
  • 261.834 F532d 21
Contenidos incompletos:
1. Panorama. La persona anciana hoy ; 2. El mensaje ; 3. Perspectiva, propuestas éticas ; 4. Testimonio, confesión y sentido
Revisión: Dios mío, toda mi vida ha sido una cadena interrumpida de gracias y de bendiciones por parte tuya. De año en año me has guiado, preservado de peligros, has compartido conmigo mis sufrimientos y mis pesos, me has alegrado alimentado, sostenido, orientado, y protegido. No me abandones ahora que mis fuerzas comienzan a flaquear. Esta oración de John Newman nace de la fe en un Dios al que no le es indiferente la peripecia humana. Un Dios cercano y amigo que no pone fecha de caducidad a la alianza de amor que ofrece al ser humano. Un Dios que sigue, acepta y acoge a los ancianos. Se dice que se comienza a envejecer cuando se empieza a mirar hacia atrás. El anciano cristiano sabe que puede seguir mirando hacia adelante. Por que lo mejor de su vida es objeto de esperanza
Valoración
    Valoración media: 0.0 (0 votos)
Existencias
Tipo de ítem Biblioteca actual Colección Signatura topográfica Copia número Estado Notas Fecha de vencimiento Código de barras
Libro Colección General Central Bogotá Sala General Colección General 261.834 F532d (Navegar estantería(Abre debajo)) 1 Disponible 0000000093322
Libro Colección General Central Bogotá Sala General Colección General 261.834 F532d (Navegar estantería(Abre debajo)) 2 Disponible 0000000093317

Incluye referencias bibliográficas

1. Panorama. La persona anciana hoy ; 2. El mensaje ; 3. Perspectiva, propuestas éticas ; 4. Testimonio, confesión y sentido

Dios mío, toda mi vida ha sido una cadena interrumpida de gracias y de bendiciones por parte tuya. De año en año me has guiado, preservado de peligros, has compartido conmigo mis sufrimientos y mis pesos, me has alegrado alimentado, sostenido, orientado, y protegido. No me abandones ahora que mis fuerzas comienzan a flaquear. Esta oración de John Newman nace de la fe en un Dios al que no le es indiferente la peripecia humana. Un Dios cercano y amigo que no pone fecha de caducidad a la alianza de amor que ofrece al ser humano. Un Dios que sigue, acepta y acoge a los ancianos. Se dice que se comienza a envejecer cuando se empieza a mirar hacia atrás. El anciano cristiano sabe que puede seguir mirando hacia adelante. Por que lo mejor de su vida es objeto de esperanza

CONTÁCTANOS:
bibliotecaservicios@ugc.edu.co
bibliougc@ugca.edu.co

Con tecnología Koha