Libro de los ejemplos del Conde Lucanor y de Patronio Juan Manuel

Por: Tipo de material: TextoTextoIdioma: Español Series Las cien obras maestras de la literatura y del pensamiento universal ; 9Detalles de publicación: Buenos Aires Losada 1939Edición: 1a edDescripción: 283 p. 17 cmTema(s): Clasificación CDD:
  • 21 863 J158l
Revisión: El Libro de los ejemplos del conde Lucanor y de Patronio, más conocido como El conde Lucanor o Libro de los ejemplos (en el castellano antiguo original: Libro de los enxiemplos del Conde Lucanor et de Patronio) se empezó a escribir en el 1330, y se concluyó en el 1335 por el infante Don Juan Manuel y está considerada su obra maestra. El propósito didáctico y moral es la marca del libro. El conde Lucanor empieza la conversación con su consejero Patronio planteándole un problema (“Un hombre me ha hecho una propuesta…” o “Temo que tal o cual persona intenta…”) y solicita consejo. Patronio siempre responde con gran humildad, asegurando no ser necesario dar consejo a una persona tan ilustre como el conde, pero ofreciéndose a contar una historia que le recuerda los problemas del conde. Las historias son ejemplos [enxiemplos] de la acción a seguir. Al final Patronio aconseja al conde actuar como lo hace el protagonista de la historia.
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Literatura Central Bogotá Sala General Colección Literatura 863 J158l (Navegar estantería(Abre debajo)) 1 Disponible 0000000095757

El Libro de los ejemplos del conde Lucanor y de Patronio, más conocido como El conde Lucanor o Libro de los ejemplos (en el castellano antiguo original: Libro de los enxiemplos del Conde Lucanor et de Patronio) se empezó a escribir en el 1330, y se concluyó en el 1335 por el infante Don Juan Manuel y está considerada su obra maestra. El propósito didáctico y moral es la marca del libro. El conde Lucanor empieza la conversación con su consejero Patronio planteándole un problema (“Un hombre me ha hecho una propuesta…” o “Temo que tal o cual persona intenta…”) y solicita consejo. Patronio siempre responde con gran humildad, asegurando no ser necesario dar consejo a una persona tan ilustre como el conde, pero ofreciéndose a contar una historia que le recuerda los problemas del conde. Las historias son ejemplos [enxiemplos] de la acción a seguir. Al final Patronio aconseja al conde actuar como lo hace el protagonista de la historia.

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