He aquí la profesión de fe del famoso autor de esta obra: Creo que tengo un alma. Creo en mi alma justa e infinita. Esta fe no tiene nada que ver con mi persona. Pero yo trato de llevar mi persona hacia la sabiduría, por consideración a mi alma. Esto es todo lo que yo creo. Lo demás no son más que ideas. Al desarrollar esta premisa, el autor despliega ante nosotros todo un tratado, que abarca su ámbito íntimo en el terreno de la filosofía o, mejor aún, de la teología, en primer lugar, y en segundo lugar, en el de la política y condiciones para la vida en general y para el acercamiento a la verdad

Ce que je crois